A Gisela siempre se la ha relacionado con los musicales puesto que durante su carrera artística a participado en ocho de todo tipo y forman parte de su currículum.
Durante los años 2008 y 2009 Gisela participó en Aloma en el
Teatre Nacional de Catalunya (Barcelona) y otros teatros de Cataluña y Baleares bajo las órdenes de Joan Lluís Bozzo. Bozzo es un actor y director teatral que forma parte de la compañía Dragoll Dagom.
El argumento es el siguiente:
Aloma es una adolescente y por lo tanto se cree única. Piensa que el mundo no la comprende y, fuera de su hermano Daniel -que se suicidó cuando ella era pequeña-, desaprueba la conducta de los adultos con su doble moral, su hipocresía y, en definitiva, su mediocridad. Igualmente, no perdona las contradicciones de los grandes y, sobre todo, no se las perdona a ella misma.
Es, como casi todas las chicas de su edad, sensible y dura a la vez, orgullosa, terca, un poco rabiosa... pero también sensible, fantasiosa, enormemente generosa; se refugia en su cuaderno, en sus escritos y poesías, en las suya música interna y va viviendo como puede, con la esperanza borrosa que un día todo cambiará. Es una chica sola que acaba de entrar en la emoción erótica de la adolescencia y que no sabe, ni tiene, donde proyectarla, donde probarla, como gestionarla.
El reparto estaba compuesto por grandes actores como Carme Sansa, Julia Möller, Anabel Totusaus, Maria Codony, Henry Lardner, Pol Orrit, Josep Julien, Ferran Frauca, Carlos Gramaje, Anna Moliner, y Marc Pujol.
Gisela en este caso interpretó el papel de Coral:
Coral es una vecina de Aloma. Una mujer joven, bonita, rica y fina. Le gustaba que los hombres estuvieran por ella. Una persona bastante superficial y que no le importaba nada ni nadie que no fuera ella misma. Descarada, muy presumida, mala persona y un poco cruel.
Aloma obtuvo una nominación en los premios Max como mejor musical.
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